No es un texto rebuscado, pomposo, pero resume lo que en cuatro años he vivido al lado de Diana. Empezó como uno de los muchos momentos en que vivia conectado al internet, en los cuáles buscaba hcer amistades para platicar, departir cosas de cine, musica, etc. Ella apareció porque su rostro me llamó mucho la atencion, y de ahi partió todo: Una relación hasta ahora estable, en las cuáles he llegado al grado de desesperación y con ganas de tirar la toalla, pero también de afianzarme mucho a la idea de no estar solo. Sé que tal vez he caído en mis propias palabras y me he llegado a ver bastante hipócrita o contradictorio, pero al final lo que importa es que siempre, como en la guerra, uno tiene que llegar al final, sin importar las circunstancias que se nos crucen en el camino: O te bajas del tren o le sigues, no hay mas opciones.
Creo que hasta ahora no me arrepiento de esto, es un gran reto en la vida de uno, el querer llegar lo mas lejos posible, al lado de alguien que comparte cama, un techo, y su vida, que tiene tanto valor como el de ella ser arriesgada al también tomar esa decisión. Esta historia no es de cuento de hadas ni de revista de chismes, es tan normal como la de cualquiera de ustedes; No hay diferencia una de otra, salvo las propias personalidades de cada quién. Y en estos cuatro años, hasta ahora, hay de todo, y seguira habiendo de todo, mientras el reloj siga caminando y nuestro entorno siga adelante como hasta ahora. Comprendo mucho que su forma de ser es tan propia como tambien el tiempo que ha compartido conmigo, asi como tambien alguien importante para ella como lo es Sebastián, y he de reconocer que encontré en el, a un gran amigo.
Tal vez cuatro años no son nada, pero son mucho más que tiempo: son momentos irrepetibles, guardados en la memoria y en el corazón. Momentos que han derramado lágrimas, risas, sangre, y mucho dolor, y que cimentan esta relación más fuerte. Aunque sienta que quiero abandonar el barco, pienso en tantos momentos felices que hemos compartido los tres, que aguanto los golpes, y me levanto a continuar protegiendo este amor de todo y todos.
Gracias por este lapso de apoyo y amor.
sábado, 20 de noviembre de 2010
domingo, 7 de noviembre de 2010
Ahogamiento
Que sufrimiento padezco. Mi cuerpo se ha vuelto un templo de tormentos, en los cuales los feligreses son mis demonios primigenios, que no dejan de blasfemar en mi interior. Sus salmos estan llenos de odio, frustración, delirio y agonía, que sucumben en mi mente y me tambalean en este andar. Por que no han sido expulsados y excomulgados de mí? Acaso se sienten reconfortados en mi? Sacian su sed de piedad contra lo que encuentran a su paso.
He dejado que me devoren lentamente, durante muchas lunas, abasteciendo la ira con su eterno crujir de quijadas al morder desesperadamente mis pensamientos y consumiendo la poca fe que me queda. Aun sin esperanza de seguir, conservo en el corazón la fuerza reservada para salir algún día de este tormento. Y esta por llegar ese día.
He dejado que me devoren lentamente, durante muchas lunas, abasteciendo la ira con su eterno crujir de quijadas al morder desesperadamente mis pensamientos y consumiendo la poca fe que me queda. Aun sin esperanza de seguir, conservo en el corazón la fuerza reservada para salir algún día de este tormento. Y esta por llegar ese día.
lunes, 1 de noviembre de 2010
Sin titulo
Heme aqui, intentando recuperar los momentos felices de un amigo... Es un poco tedioso, pero hay que hacerlo, por considerar que nunca fue un error mio. Soledad de por medio, con los perros afuera sin dejar de ladrar, evadiendo el sueño, con un poco de cansancio, escribo mis líneas acostumbradas de momentos que he vivido. Hace dos días sufri una especie de "ahogamiento" El cuál no me permitió respirar durante unos minutos. Si, sufrí de pánico, pero pude contenerlo e intentar abrir mi nariz para que entrara el aire. Lo logre, deje que fluyera la respiración hasta retomar la calma, y después, regrese a la cama a dormir, no sin pensar que pasaria si no me esforzara a levantarme de ese trágico episodio. Cuando el sol salió, pude dar gracias a la vida por otro dia mas, y seguir con este proceso de vivir, darle gusto a lo que tengo que hacer y alegrarme por estar escribiendo esto y compartirlo.
Hoy es el momento, el mañana, aún no llega.
Hoy es el momento, el mañana, aún no llega.
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